No da igual cualquier entidad. No da igual el objetivo que se tengan, los plazos y los intereses. Es importante evaluar cada caso y elegir la opción más adecuada a las necesidades y condiciones económicas en que se esté.
- Tasa de interés: Esta es la primer característica que debe interesar en un crédito, si la tasa es variable y el plazo es largo el riesgo de que el préstamo se vaya de las manos es más alto, en tanto que si la tasa es fija los riesgos se reducen.
- Tener clara la cantidad: Una tendencia muy común es la de pedir de más. Es importante tener en claro que los criterios para definir la cantidad a solicitar son cuánto se puede devolver y cuanto (exactamente) se necesita.
- Plazos de pago: Usualmente las personas buscan pagar cuotas menores en plazos más largos, pero esto esconde una trampa, a más largos plazos mayores son los intereses y más alto el costo del crédito.
- Estudiar: Cada caso es único y es importante leer a fondo todas las características y condiciones de los créditos personales a la luz de las necesidades que se tienen. De ser necesario, buscar un asesor financiero puede ser de gran ayuda.
Por su parte, los créditos por internet son una alternativa a los bancos y a las entidades financieras tradicionales que ofrecen excelentes condiciones y ayudan a ganar liquidez en poco tiempo. Suelen exigir pocas condiciones y tramitarse en minutos, a la vez que permiten plazos cortos con bajos intereses en montos reales, y se encuentran regulados por lo que ofrecen gran seguridad y confidencialidad.