EFE.- El nuevo gobierno israelí aprobó hoy el establecimiento de una comisión estatal para investigar las causas de la fatal estampida humana que dejó 45 muertos a finales de abril durante una masiva celebración de judíos ultraortodoxos en el norte del país.
La creación de un Comité Estatal para analizar en profundidad los hechos de la avalancha fatal -la peor tragedia civil en la historia reciente de Israel- fue una solicitud realizada desde un principio por sectores como los familiares de los fallecidos, todos ellos judíos religiosos, aunque los partidos ultraortodoxos que representan a esta comunidad se opusieron.
Estos grupos eran socios del anterior Ejecutivo de Benjamín Netanyahu, pero acudieron a la oposición tras la inauguración hace una semana del «Gobierno del cambio» que encabeza el nuevo primer ministro, Naftali Benet, quien en su primera reunión de gabinete ministerial de este Mañana aprobó por unanimidad la creación de la comisión.
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El comité «investigará la cadena de eventos» y revelará «hallazgos y conclusiones sobre todos los aspectos» del evento religioso que condujo a la trágica estampida, cuando unos 100.000 ultraortodoxos se reunieron el pasado mes de abril en el monte Merón, en el norte de Israel, en un tradicional peregrinación para conmemorar la muerte de un famoso rabino del siglo II supuestamente enterrado allí.
«La responsabilidad de aprender las lecciones y prevenir» otra tragedia similar «está sobre nuestros hombros», declaró hoy Benet al inicio de la reunión del Gabinete de Ministros.
«La comisión no puede traer de vuelta a los fallecidos, pero el Ejecutivo puede hacer todo lo posible para evitar pérdidas innecesarias de vidas en el futuro», concluyó el Consejero Delegado.
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