EU da luz verde a la construcción de su mayor parque eólico marino

El gobierno de Estados Unidos aprobó este martes un megaproyecto de turbinas de viento en el Atlántico, símbolo de la voluntad del presidente Joe Biden de desarrollar el sector de la energía verde para combatir el cambio climático.

Vineyard Wind prevé la construcción de hasta 84 aerogeneradores en un radio de 12 millas náuticas de Martha’s Vineyard y Nantucket, dos islas frente a la costa del estado de Massachusetts, famosas por ser Centros turisticos para ricos.

Este parque eólico marino en el noreste del país generará 800 megavatios (MW) y proporcionará electricidad a 400.000 hogares y negocios, mientras crea 3.600 puestos de trabajo, dijo el Departamento del Interior en un comunicado.

La iniciativa forma parte de un gran plan de inversión para desarrollar energía eólica marina, que consiste en generar 30 gigavatios de energía, suficientes para abastecer a 10 millones de hogares en Estados Unidos, para el 2030.

Para hacer esto, la administración de Biden planea invertir más de $ 12 mil millones al año en las costas del Atlántico y el Pacífico, creando decenas de miles de puestos de trabajo.

«La aprobación de este proyecto es un paso importante hacia el logro de los objetivos del gobierno de crear empleos sindicales bien remunerados mientras se lucha contra el cambio climático», dijo la directora de cartera Deb Haaland.

Esta luz verde «no es el comienzo de un solo proyecto, es el lanzamiento de una nueva industria», dijo el director de Vineyard Wind, Lars Pedersen, en otro comunicado.

Vineyard Wind, una empresa conjunta entre Avangrid Renewables y Copenhagen Infrastructure Partners, dijo que el proyecto estará operativo en 2023.

Actualmente, solo un parque eólico marino está en pleno funcionamiento en los Estados Unidos: el parque eólico Block Island, terminado a finales de 2016 frente al estado de Rhode Island y capaz de producir 30 MW.

Un proyecto en Virginia, con una capacidad de 12 MW, se completará en 2026 y podría proporcionar energía a 600.000 hogares, según su futuro operador Dominion Energy.

Además, se están desarrollando otros proyectos en Rhode Island, Nueva York, Nueva Jersey, Delaware, Maryland y Carolina del Norte.

Este apoyo de Biden a la energía eólica contrasta radicalmente con las posiciones de su predecesor Donald Trump, quien ridiculizó repetidamente esta energía renovable durante su mandato, alegando que era costosa e ineficiente.

No es la única muestra de la apuesta de Biden por el protección del medio ambiente. Tan pronto como asumió el cargo en enero, Biden regresó al Acuerdo de París para combatir el cambio climático, que Trump había abandonado, y en abril anunció nuevos objetivos más ambiciosos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

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